Atención plena de la mano (extraido de ACT made Simple, de Russ Harris, traducción Fabián Maero)
(los puntos suspensivos indican pausas de alrededor de tres segundos)
Te invito a que te pongas en una posición cómoda. Y quiero que tan solo vuelvas una de tus manos palma hacia arriba, y la sostengas a una distancia cómoda de tu rostro. Por los próximos minutos me gustaría que observes tu mano como si fueras un científico curioso que nunca antes ha visto una mano. Y desde esa perspectiva, primero notá el trazo. Mentalmente trazá el contorno de tu mano, comenzando en la base del pulgar y trazando alrededor de todos los dedos… y notá las formas de los espacios entre los dedos… y notá donde tu mano termina en la muñeca. Y ahora, notá el color de tu piel… nota que no es un solo color… hay distintos tonos y sombras y áreas moteadas… y muy lentamente estirá tus dedos hacia afuera y llevalos hacia atrás tanto como puedan ir, y notá cómo el color cambia en tu piel… y luego lentamente soltá la tensión y notá cómo el color regresa… y hacelo una vez más, muy lentamente, notando cómo el color desaparece…y luego regresa…y ahora notá las largas líneas en tu palma…notá las figuras que forman cuando se juntan o divergen o se cruzan… y concéntrate en una de esas líneas y notá cómo hay muchas líneas más pequeñas que llegan a ella y que parten de ella… y ahora llevá tu atención a la punta de uno de tus dedos, y notá el patrón en espiral allí… el patrón que siempre ves en las huellas digitales… y notá cómo el patrón no se detiene en la punta de tu dedo…sigue, bajando por tu dedo… y trazalo hacia abajo y notá cómo continúa en tu palma… y ahora, lentamente, traé tu dedo meñique hacia tu pulgar…y notá la carne de tu palma arrugándose…y lentamente soltálo…y notá cómo la carne vuelve a su contorno normal… y ahora quiero que pongas tu mano de costado, en la posición de un golpe de karate, y que notes las diferencias entre la piel de la palma y la piel del dorso… y observá tu dedo índice, y notá que hay una especie de línea divisoria, donde esos dos tipos de piel se encuentran… y lentamente volteá tu mano… y notá la piel en el dorso… y notá cualquier crítica o juicio que haga tu mente… notá cualquier cicatriz, lunar o imperfección… y notá los diferentes colores en la piel… donde pasa una vena… o sobre tus nudillos.. y lentamente, cerrá tu mano hasta formar con suavidad un puño… y notá cómo la textura de tu piel cambia… y notá cualquier comentario que tu mente haga sobre eso… y enfócate en tus nudillos… y gentilmente rotá tu puño, y notá los contornos y valles de tus nudillos… y ahora apretá tu puño, y notá qué le sucede a los nudillos… a su color y prominencia… y lentamente abrí tu mano, enderezá tus dedos y notá cómo tus nudillos desaparecen… y ahora llevá tu atención a una de tus uñas… y notá la textura de la uña… y los distintos tonos y colores… y notá dónde desaparece bajo la piel… y la cutícula que la sella allí… y muy lentamente, muy gentilmente, abanicá tus dedos arriba y abajo… y notá los tendones moviéndose bajo la piel… tirando ida y vuelta como pistones… y eso nos deja en unos cinco minutos.
Discusión del ejercicio:
“¿fue tedioso, lento y aburrido? ¿Qué descubriste? ¿Qué te interesó más?”. Una vez hecho esto: “¿cuál es la relevancia de este ejercicio en tu vida?”
Los puntos a remarcar son a) tomamos las cosas por sentado y generalmente no las apreciamos y b) cuando realmente prestamos atención, la vida es más interesante y satisfactoria.
¿Qué pasaría en tus relaciones más cercanas si prestaras atención a tus seres queridos de la misma manera que lo hiciste con tu mano?” “La próxima vez que te sientas aburrido, estresado, ansioso o enganchado de cualquier otra manera en tu cabeza, ¿estarías dispuesto/a a realmente involucrarte en lo que sea que estés haciendo, como acabás de hacer con tu mano, y notar qué es lo que sucede?